En octubre, en Gretna Green, cerca de la frontera con Escocia, o en el muelle de Brigthon, en el Reino Unido, da inicio la temporada del «baile de los estorninos» (los ingleses la llaman «murmurations»). Es una extraña danza sincronizada, en las que las aves forman grandes nubes negras, que los científicos aún no pueden explicar.
El plumaje de esta ave es de color negro tornasolado, y su tamaño medio es de 20 centímetros. Su principal característica es el enigmático vuelo. Lo realizan de manera sincronizada, y los ornitólogos aún no lo pudieron descifrar, ni siquiera utilizando modelos matemáticos en 3D. El baile de los estorninos (Estornino europeo o común), no puede preverse y se produce en diferentes lugares (además de Inglaterra en Israel, en Canadá, etc).
Anne Goodenough, ornitóloga de la Universidad de Gloucestershire, Inglaterra, ha publicado en línea un cuestionario, en colaboración con la Sociedad de Biología. Éste ha sido contestado por quienes puedan divisar el evento, y dice lo siguiente: «Nos interesa todos y cada uno de estos eventos. Dónde ocurren, cuánto duran y cuántas aves participan» (sic).
¿Por qué se cree que lo hacen?
La teoría más aceptada, es que realizan esta puesta en escena, para defenderse de las aves predadoras (especialmente de los halcones). Es que estar en un grupo tan grande, crea la sensación de fortaleza que hace que los posibles atacantes «lo piensen dos veces».
Otra de las conjeturas, es la sostenida por la Profesora Goodenough, que dice: «Volar en una bandada grande tiene beneficios térmicos en comparación con volar solo o en un grupo pequeño», es decir, que estar en formación las mantiene abrigadas.
Cómo interactúan los estorninos
Un equipo de científicos del Consejo Nacional de Investigación de la Universidad La Sapienza de Roma, liderados por el doctor Andrea Cavagna y la doctora Irene Giardina, llevó a cabo un estudio en 2008. Observaron y filmaron el vuelo, que realizó una banda de aproximadamente 2700 aves y lo reconstruyeron en 3D.
Al analizar la filmación, descubrieron que los estorninos, se mantienen más cerca de los congéneres que se hallan a sus flancos. Además, se mantienen más alejados de los que se hallan por delante y por detrás. También pudieron determinar que, cada miembro de la bandada, solo imita los movimientos de los seis o siete que tiene a su alrededor, ignorando a los demás pájaros.
Conclusión de las investigaciones
Lamentablemente los investigadores italianos, no pudieron averiguar cómo logran coordinar los vuelos, y bajo qué reglas. Todo ello, pese a la utilización de modelos computacionales y matemáticos de última generación.
A su vez Matthew Turner, experto en comportamiento de bandadas y físico de la Universidad de Warwick-Inglaterra, utilizando la misma metodología, trató de usar solamente reglas matemáticas, no obteniendo resultados claros, lo que lo llevó a manifestar: «Todavía queda mucho por descubrir».
Mientras tanto, tan solo nos queda disfrutar «el baile de los estorninos», sin importarnos cómo y porqué lo hacen.