Los funcionarios de la Autoridad de Transporte de Eslovaquia, acaban de emitir un certificado de aeronavegabilidad, para este novedoso coche volador. Después de pasar con gran éxito las exigentes pruebas a las que fue sometido, ya cuenta con el permiso para despegar y aterrizar en la República Eslovaca
El automóvil que puede transformarse en un pequeño avión dejó de ser una historia de ciencia ficción, para pasar a ser una realidad tangible. AirCar, la empresa que se encargó del desarrollo del vehículo, fue autorizada de acuerdo con los estándares de la Agencia Europea de Seguridad Aérea (EASA), por lo que podría volar por toda Europa, según manifiesta Klein Vision, la empresa que lo fabrica.
Desarrollo técnico del Air Car
Su creador, el eslovaco Stefan Klein, graduado en la Universidad Tecnológica de Eslovaquia y colaborador en investigaciones de importantes marcas automotrices como Audi, Volkswagen y BMW, ve cumplido un sueño de 25 años.
Fundador de la compañía Klein Vision, contó con la invalorable colaboración de ocho especialistas, que trabajaron durante más de 100.000 horas, convirtiendo conceptos de diseño en modelos matemáticos.
Características del coche volador
El prototipo, está equipado con un motor BMW de 160 caballos de potencia. Alcanza velocidades de vuelo de hasta 190 kilómetros por hora, superando los 2.500 metros de altitud. Además, se alimenta con combustible común, del que se adquiere en cualquier gasolinera dijo Anton Zajac, cofundador de Klein Vision, en un comunicado.
Puede transformarse de automóvil a avión en 2 minutos y 15 segundos, desplegando las alas estrechas se pliegan a lo largo de los lados del automóvil y transportar dos personas, con un peso máximo de 200 kilogramos. Además, tiene una hélice fija, un paracaídas balístico, una autonomía de 500 kilómetros y consume 28 litros de gasolina.
Pruebas que debió sortear para obtener la licencia
Voceros de la compañía dijeron: «Las desafiantes pruebas de vuelo incluyeron la gama completa de maniobras de vuelo y rendimiento y demostraron una asombrosa estabilidad estática y dinámica en el modo avión». Realizó giros de 45 grados, 200 despegues y aterrizajes y 70 horas de vuelos. Además, «los procedimientos de despegue y aterrizaje se lograron incluso sin que el piloto tuviera que tocar los controles de vuelo».
El vuelo de prueba se realizó entre Nitra y Bratislava, y tuvo una duración de 35 minutos. En el aire, el vehículo alcanzó una velocidad de crucero de 170 km/h. Al arribar a destino en modo avión, fue convertido en coche y conducido al centro de la ciudad, donde los reporteros invitados al evento se congregaron para recibirlo.
Proyectos futuros de AirCar
Stefan Klein dijo respecto de la autorización: «La certificación AirCar abre la puerta a la producción en masa de autos voladores muy eficientes» (sic). Además, añadió: «Es oficial y la confirmación final de nuestra capacidad para cambiar los viajes de media distancia para siempre» (sic).
La compañía, ya está trabajando en su próximo prototipo, que desarrollará 300 kilómetros por hora, la velocidad de un verdadero avión. Tendrá una autonomía de 1000 kilómetros y estará equipado con un motor de 300 caballos.
La empresa le dijo a BBC News que planeaba volar a Londres desde París en un futuro cercano, y espera tener el «AirCar» comercialmente disponible dentro de 12 meses.
«Esta certificación AirCar abre la puerta a la producción en masa de autos voladores muy eficientes», dijo el piloto de pruebas Stefan Klein, inventor del auto y líder del equipo de desarrollo.
Perspectivas de un mundo con coches voladores
El Dr. Stephen Wright, investigador sénior en aviónica y aeronaves de la Universidad del Oeste de Inglaterra dijo que: «soy cautelosamente optimista de que voy a ver una algunos AirCars algún día, pero creo que todavía hay un camino por recorrer» (sic). Además describió al prototipo como «el hijo amado de un Bugatti Veyron y un Cesna 172».
Consultado sobre si los coches voladores son el futuro, contestó sí…y no, ya que, «Desde el punto de vista del transporte, tiene un nicho, aunque es un nicho muy interesante».
El presidente del Grupo de especialistas en mantenimiento y aeronavegabilidad de la Royal Aeronautical Society, Kyriakos Kourousis manifestó que: «Si la empresa que está involucrada en la certificación ha presentado el caso comercial, esto avanzará en la creación de un producto que pueda llegar al mercado». Ésta no es la primera vez que se certifican tipos similares de vehículos» (sic), añadió.
Otros proyectos
El PAL-V Liberty de tres ruedas, es un autogiro o girocóptero, de la empresa PAL-V, con sede en los Países Bajos. Está autorizado para circular por las carreteras europeas, que actualmente está esperando la certificación de la Agencia de Seguridad Aérea de la Unión Europea.
El auto volador Terrafugia TF-X de la automotriz estadounidense con base en Massachusetts, posee ruedas para andar como un auto, y sus hélices y alas son usadas para volar. Obtuvo un certificado de aeronavegabilidad de la FAA para su vehículo Transition, que autoriza a sus usuarios a conducir y volar.
La ‘startup’ sueca Jetson Aero lanzó al mercado un coche volador «Jetson One» que pesa 40 kilos. Fue promocionado como el único «auto volador» de despegue y aterrizaje vertical personal disponible en el mercado. Está propulsado por un motor eléctrico, y puede alcanzar hasta 120 kilómetros por hora.
Branko Sarh, miembro técnico sénior de Boeing, señaló: «La transición automatizada de un vehículo de ruta a un vehículo aéreo y viceversa, desplegar/retraer las alas y la cola, no es sólo el resultado del entusiasmo pionero, el espíritu innovador y el coraje; es el resultado de una excelente ingeniería y conocimiento profesional» (sic).
Servicios de taxi aéreo
Dado que el AirCar despega y aterriza como un avión convencional, se requiere una licencia de piloto para volar. Es por eso que varias empresas están trabajando en servicios de taxi aéreo sin piloto, con vuelo autónomo, y aterrizaje y despegue vertical.
El Dr. Wright dijo: «Cualquiera puede hacer un avión, pero el truco es hacer uno que vuele y vuele y vuele durante un millón de horas, con una persona a bordo, sin tener un incidente» (sic).
