La revista Physics of the Earth and Planetary Interiors publicó recientemente, un estudio de investigadores del Instituto de Geofísica y Planetología de Hawái y de la Agencia de Ciencia y Tecnología Marina-Terrestre de Japón. En él, manifiestan que se está produciendo un fenómeno a miles de kilómetros bajo tierra, al cual no le encuentran explicación. Es que el núcleo de nuestro planeta (una masa de hierro y níquel), está creciendo de manera desigual. Es decir, más de un lado que de otro.
Como se comprueba este fenómeno
Daniel Frost, científico asistente del proyecto de investigación en la Universidad de California, manifiesta que, mediante simulaciones por computadora, se han desarrollado mapas que demostrarían que el área del núcleo que se encuentra ubicada en una zona bajo el mar de Banda, en Indonesia, es mayor que la parte que se halla en el otro extremo, debajo de Brasil. «Estamos encontrando un mundo oculto completamente nuevo»
dijo Jessica Irving, una sismóloga de la Universidad de Bristol, a pesar de no haber participado en el estudio.
La científica explica que, a partir de la recolección de datos de las ondas sísmicas que producen los terremotos, se puede hacer la comprobación del funcionamiento interno de la Tierra. Es como hacer una tomografía computarizada de una persona. Este estudio llevó a concluir que se ha producido un comportamiento, con un «patrón desequilibrado».
En consecuencia de ello, nuevos cristales de hierro se forman más rápidamente en el lado este del núcleo. Esto, de acuerdo a Rhett Butler, uno de los autores del estudio, tiene un claro significado, en el sentido que, el núcleo del planeta no es sólido en su totalidad. Sino que, cerca de su superficie tiene pedazos de hierro líquido y “blando”.
Conclusión
Este estudio revoluciona notablemente el conocimiento del campo magnético del Planeta Tierra. Esto nos facilita una comprensión más acabada, para entender la relación entre el interior de un planeta y su actividad magnética. Rhett Buttler agregó: «Observamos muchos detalles dentro del núcleo interno que no veíamos antes» (sic).
